Un batacazo histórico: Centro Español dejó afuera a Tigre en su primer partido por Fase Final
En uno de los resultados más sorprendentes en la historia de la Copa Argentina, el representante de la Primera D, que se estrenó en los 32avos de Final, eliminó por penales a su par de la Liga Profesional luego de ganar por 5-4 en la definición por penales (habían igualado 1-1 en los 90 minutos). Su próximo adversario será otro equipo de la máxima categoría: Defensa y Justicia.
“Hay algo que no se puede comprar con nada: ¡la gloria!”. Las palabras de Pablo Ocampo resonaron en uno de los vestuarios del estadio Nuevo Francisco Urbano de Deportivo Morón. El delantero encabezó la salida de Centro Español a disputar un encuentro trascendental en la historia del club: el cruce inédito ante un representante de la máxima categoría como Tigre, que venía de sumar cuatro puntos en las dos jornadas iniciales de la Liga Profesional. Todos los condicionantes que asomaban como una brecha inseparable entre ambas instituciones quedarían de lado en la jornada nocturna del 8 de febrero y se produciría uno de los resultados más resonantes desde la reaparición de la Copa Argentina en 2011: el Gallego se impuso por penales y se convirtió en el segundo representante de la D que elimina a un rival de Primera.
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Era un desafío de tremenda responsabilidad para un Centro Español que había perdido ante Yupanqui la final de la Primera D, serie que hubiese representado su primer ascenso de categoría. Sin embargo, el Gallego se repuso para imponerse en el Reducido por el cupo restante a la Copa Argentina y, además de asegurar su regreso al certamen después de ocho años, se ganó el derecho a estrenarse en el cuadro principal. El encuentro de 32avos de Final ante Tigre presentaría un desarrollo similar. Apenas un minuto y 19 segundos habían transcurrido cuando se juntaron dos refuerzos del Matador para gestar la apertura del marcador. Pase profundo de Aaron Molinas a espaldas de la defensa, definición cruzada de Tomás Badaloni. Tabaré Benítez alcanzó a desviar el remate pero no fue suficiente para impedir el primer tanto en contra de su valla.
Si bien la conversión rápida parecía presagiar un final similar a la goleada de Independiente sobre Central Ballester en 2018 (los ocho goles se mantienen como máxima marca en un encuentro por la competencia), Centro Español supo capear el temporal inicial y comenzó a salir de su campo. Un tiro libre ejecutado por Ignacio Galván, el mediocampista de mayor talentoso en el 5-3-2 impuesto por Diego Herrero, significó el aviso inicial al rebotar en el sector externo de la red. Tigre, que había presentado una formación alternativa, pareció aflojar el ritmo por la ventaja y se concentró en buscar el predominio en la tenencia de la pelota para evitar complicaciones.
La historia cambiaría en el minuto diez del segundo tiempo. Galván controló la pelota con el pecho en el círculo central, se generó espacios con una gambeta ante Sebastián Medina y lanzó un pase majestuoso que dejó cara a cara a Felipe Senn con Santiago Rojas, arquero arribado desde Nacional de Paraguay. El delantero no dudó en un instante crucial para su carrera y vulneró la resistencia rival para desatar la euforia en el plantel, el cuerpo técnico y los hinchas de Centro Español. Primer imagen memorable de la jornada para el club de Villa Sarmiento. El empate inesperado despertó la reacción de Diego Martínez, entrenador de Tigre: introdujo cuatro modificaciones, con el ingreso destacado de Mateo Retegui, goleador de la pasada Liga Profesional.
Un intento a quemarropa de Facundo Colidio y una volea por encima del travesaño de Gonzalo Flores antecedieron una saga de ocasiones erradas de manera increíble por Retegui, que falló dos remates netos y un cabezazo a la salida de un tiro de esquina. La carencia de efectividad en las ocasiones sería perjudicial para Tigre, que observó el aguante estoico de Centro Español hasta el instante en el que Sebastián Zunino pitó el final del encuentro. La tanda de penales sería una continuación del tramo decisivo, ya que comenzó con una atajada de Benítez sobre Retegui. Con el marcador 4-3 favorable al Gallego, el propio arquero contó con la oportunidad de sellar la clasificación. Sin embargo, su intento saldría desviado y prolongaría el suspenso hasta la duodécima ejecución, cuando Lautaro Montoya elevó su zurdazo por encima del travesaño.
Una corrida interminable de los futbolistas de Centro Español dio inicio a un festejo acorde. Sabían que habían conseguido un hito que solamente tenía un precedente de 2019, cuando Real Pilar se había impuesto por 1-0 sobre Vélez. El Gallego se sobrepuso a la enorme diferencia entre categorías, vivió un debut perfecto en la Fase Final y tendrá la oportunidad de medirse ante otro representante de la Liga Profesional: jugará con Defensa y Justicia en 16avos de Final.
